Firma Institucional

Seguridad Radiológica y desechos Radiactivos


Seguridad Radiológica

La radiación es parte de nuestras vidas.

Los seres vivos recibimos radiaciones en forma natural de fuentes como el sol, la corteza terrestre, los alimentos que consumimos, el agua que bebemos, los materiales de construcción y el televisor, por mencionar algunos ejemplos.

Por añadidura, los seres humanos somos radiactivos. En nuestra composición natural poseemos tritio, carbono 14 y potasio 40, entre otros elementos, y cuando nos encontramos cerca de otras personas, nos estamos radiando mutuamente.



¿La radiación es peligrosa?

La radiación es necesaria para los seres vivos y en pequeñas cantidades, como las que recibimos cotidianamente, no representa ningún riesgo. A esta radiación le llamamos radiación de fondo y no daña ni a los seres vivos ni al ambiente. .

Existen algunos materiales radiactivos que han sido capaces de salvar millones de vidas, como ocurre en el caso de la medicina nuclear. Otras aplicaciones se dan en la agricultura, la industria y la investigación de las que derivan múltiples beneficios. Después de ser utilizados, estos materiales se convierten en los llamados desechos radiactivos.

A diferencia de otras, los desechos que produce la industria nuclear se acondicionan, se almacenan y se vigilan de tal forma que no representen ningún riesgo ni para las personas ni para el ambiente.

Es importante no olvidar que los materiales radiactivos decaen en cierto tiempo. Esto es, los materiales radiactivos disminuyen progresivamente su emisión de radiación hasta que eventualmente dejan de ser radiactivos. .

Los materiales utilizados en la medicina nuclear emiten dosis pequeñas de radiación. Esto garantiza que no dañen a los pacientes y que sus desechos decaigan en poco tiempo.


PLANTA DE TRATAMIENTO DE DESECHOS RADIACTIVOS (PATRADER) 

Seguridad Radiológica

El 70% de los desechos radiactivos originados en actividades no energéticas en México provienen del área médica y, el resto, se origina en aplicaciones industriales y de investigación.

En México, todas las organizaciones que utilizan fuentes radiactivas, en cualquiera de sus aplicaciones, están reguladas por la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias (CNSNS), incluyendo al Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ)




¿Tienen algún uso los desechos radiactivos?

No se les da uso alguno, solo se almacenan temporalmente en instalaciones superficiales, y hasta que el país cuente con un centro de disposición.

¿En México se tratan los desechos radiactivos?

Una de las capacidades tecnológicas del ININ es gestionar los desechos radiactivos de baja y media intensidad de origen no energético y para eso cuenta con la Planta de Tratamiento de Desechos Radiactivos (PATRADER). Por medio de la gestión de los desechos radiactivos, el ININ contribuye en dos tareas fundamentales: la salvaguarda de la salud de las personas y la preservación del ambiente.

La PATRADER se encuentra ubicada en el Centro Nuclear "Nabor Carrillo Flores", en la carretera México-Toluca s/n, la Marquesa, Ocoyoacac. en el Estado de México. Esta planta fue instalada en el año de 1968.

Derivadas de actividades en medicina y otras mencionadas anteriormente, el ININ recibe anualmente un promedio de 15 metros cúbicos de desechos sólidos y 4.5 metros cúbicos de desechos líquidos de diversas composiciones químicas.


En la PATRADER los desechos radiactivos reciben el tratamiento adecuado según su naturaleza: los sólidos son compactados y embalados en bidones de acero de 200 litros de capacidad; los líquidos son acondicionados por evaporación o precipitación y cementados en bidones; y los biológicos son tratados para desactivarlos biológicamente, compactarlos y embalarlos en bidones.

Seguridad Radiológica



¿Cómo se tratan los desechos radiactivos en la PATRADER?

La PATRADER trata los desechos radiactivos sólidos por dos técnicas: compactación y deshidratación; los desechos radiactivos líquidos acuosos por precipitación y decaimiento radiactivo. En el caso de las fuentes selladas, por inmovilización.

La PATRADER clasifica los desechos que recibe en:
o Líquidos
o Sólidos
o Fuentes gastadas.

La PATRADER trata todos los desechos radiactivos que recibe conforme a las recomendaciones y estándares que el Organismo Internacional de Energía Atómica ha recomendado a sus Estados Miembros. En este contexto, la PATRADER trata los desechos radiactivos sólidos por dos técnicas: compactación y decaimiento; los desechos radiactivos líquidos acuosos por precipitación y decaimiento radiactivo. En el caso de las fuentes selladas, por inmovilización. A continuación se explica cada uno de éstos:

o Compactación: Consiste en reducir el volumen de los desechos compactables (papel, tela,plástico, etc.) por medio de un sistema de compresión neumático y/o hidráulico. Este sistema reduce significativamente el volumen del desecho optimizando el espacio y los costos de almacenamiento.

o Decaimiento radiactivo: Este proceso aprovecha la manera natural en la que los núcleos atómicos inestables buscan su estabilidad energética, emitiendo radiación (de cualquier tipo) o bien emitiendo partículas. El tiempo de decaimiento depende del tiempo de vida media del radionúclido.

o Precipitación: Consiste en remover el material radiactivo del líquido empleando sustancias químicas adecuadas Estas sustancias promueven la formación de un material insoluble, que concentra el material radiactivo, y que es recuperable fácilmente por acción de la gravedad. Mediante este procedimiento se concentra el material radiactivo en un volumen pequeño. El sólido recuperable es p osteriormente inmovilizado.

o Inmovilización: Consiste en incorporar el desecho radiactivo a una matriz sólida con el objeto de evitar su dispersión. Dependiendo del tipo de energía que emita será el tipo de inmovilización que se aplique, por ejemplo en el caso de un emisor gamma, el material ideal para la inmovilización es el plomo. Una vez que se ha inmovilizado el desecho radiactivo, éste se incorpora en un contenedor para facilitar su transporte y manejo.

Cada bidón se rotula con la siguiente información: Identificación del bidón, tipo de desecho, radioisótopo, actividad, nivel de radiación, fecha de envase y peso. Se mantienen registros detallados en papel y en forma digital de los datos de los bidones y su ubicación dentro de los almacenes.


En síntesis, las técnicas aplicadas en la PATRADER a la gestión de desechos radiactivos pueden clasificarse en cuatro categorías: compactación, decaimiento, inmovilización y precipitación


CENTRO DE ALMACENAMIENTO DE DESECHOS RADIACTIVOS (CADER) 


Seguridad Radiológica

El CADER es un centro de almacenamiento temporal operado por el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ), que recibe los desechos radiactivos de bajo y medio nivel generados en actividades no energéticas en nuestro país con el fin de vigilarlos y controlarlos estrictamente, de acuerdo con las leyes y reglamentos nacionales y recomendaciones internacionales.






La CNSNS establece las condiciones para el correcto manejo y gestión de los materiales radiactivos y verifica su estricto cumplimiento, durante todo su ciclo de vida, hasta que se declara como desecho radiactivo y posteriormente en desecho convencional cuando deja de emitir radiación


¿Es necesario un centro de almacenamiento de desechos radiactivos?

Los desechos radiactivos requieren ser gestionados de una forma segura. Por ello es tan importante que exista un centro de almacenamiento, de lo contrario no habría un control adecuado de estos materiales.

¿De dónde salen los desechos radiactivos?

Los desechos que almacena el CADER son producto de las aplicaciones de materiales radiactivos en la industria, medicina y la investigación provenientes de todo el país. Por ejemplo, en los hospitales se generan jeringas, guantes, papeles, recipientes y algodones con contaminación radiactiva, así como fuentes gastadas utilizadas en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades como el cáncer. En la industria se generan fuentes gastadas utilizadas como medidores de procesos industriales como el llenado de envases como refrescos, latas, cervezas y otros; también se usan en la medición y control de espesores de laminados como papel, acero, telas y otros.

Después de pasar por la PATRADER (como se describió arriba), los bidones se transportan al CADER, en condiciones de seguridad física y radiológica adecuadas y en vehículos debidamente autorizados por la CNSNS.

El personal técnico del CADER está capacitado para realizar su labor con responsabilidad y eficacia en el manejo, control y vigilancia de los desechos radiactivos.

La radiación que emiten los desechos radiactivos almacenados en el CADER es contenida por los bidones y los edificios de la misma instalación, de manera que fuera de ellos los niveles de radiación son equivalentes a la radiación de fondo. De ninguna manera esta radiación puede transformar en radiactivos a los objetos ni a los seres vivos. No es posible que la radiactividad de esos desechos viaje kilómetros. El almacenamiento de desechos radiactivos no causa ningún problema de salud.

Seguridad Radiológica



Para comprobar que los niveles de radiación se mantengan a niveles normales, personal del ININ realiza en forma permanente estudios de vigilancia radiológica ambiental alrededor del CADER en muestras de:

-Aire
-Agua superficial y de los pozos
-Tierra del predio y de las zonas aledañas
-Vegetales (tuna, maíz y nopales)





Los resultados de esta vigilancia indican que en los alrededores del CADER no hay impacto radiológico más allá de los límites autorizados por la CNSNS.

El ININ sistemáticamente ha procurado que el personal involucrado en la utilización de fuentes de radiación cumpla con la normatividad nacional e internacional vigentes, en materia de seguridad radiológica. De hecho, en 1982 se expide el primer reglamento institucional de seguridad radiológica.  

Los estudios que se practican en forma rutinaria en el CADER y sus alrededores se realizan estudios de acuerdo con normas estrictas como la Norma Oficial Mexicana NOM-035-NUCL-2013 y el Reglamento General de Seguridad Radiológica, entre otras. Así se demuestra que el CADER no tiene impacto radiológico alguno en la población o el ambiente

En este sentido, a través de equipos especializados, se elaboran de memorias analíticas de instalaciones radiactivas; el transporte de fuentes radiactivas en todo el país; la medición radiológica de cuerpo entero; la recolección de desechos sólidos y líquidos; la descontaminación radiactiva de personas, equipos y superficies; el almacenamiento temporal de fuentes radiactivas en desuso y material con contaminación radiactiva fija; y el acondicionamiento y tratamiento de desechos radiactivos, entre otras acciones.

¿Cuáles son las actividades del CADER?

o Almacenar temporalmente los desechos radiactivos obtenidos de la utilización de materiales radiactivos en la medicina, la industria y la investigación.

o Recibir únicamente desechos radiactivos que estén debidamente caracterizados.

o Recibir desechos radiactivos que no posean propiedades explosivas, pirofóricas o corrosivas, ni desechos radiactivos líquidos.

o Realizar la vigilancia de los almacenes superficiales con el objeto de garantizar su seguridad física y radiológica.

¿Qué almacena el CADER?

El Centro de Almacenamiento de Desechos Radiactivos (CADER) es una instalación que realiza el almacenamiento temporal de los desechos radiactivos que se producen en aplicaciones industriales, médicas y de investigación en todo el territorio nacional. Los materiales radiactivos se emplean principalmente en:

o Tratamiento de cáncer.

o Irradiación de sangre en hospitales, a fin de desbacterizarla.

o Control de procesos industriales, como el llenado de envases, entre otros.

o Control de calidad en componentes y tuberías de plantas industriales.

o Prospección de petróleo.

o Investigación científica.

Estos materiales, al final de su ciclo de vida, requieren ser gestionados de una forma segura, de manera que no se conviertan en un problema de salud o seguridad para las personas y el ambiente.

Los principales generadores por aplicaciones médicas y hospitalarias en México, comprenden fuentes selladas gastadas y fuentes abiertas utilizadas en diagnóstico y radioterapia. Estos desechos son generados por hospitales públicos como: el Instituto Mexicano del Seguro Social (Centro Médico Nacional Siglo XXI), la Secretaría de Salud (Hospital Juárez) o los institutos nacionales de Cancerología, Nutrición, Epidemiológicas, de Salud Pública, Mexicano de Psiquiatría, de Enfermedades Respiratorias, entre otros, así como por instituciones privadas. Los desechos radiactivos generados por industrias públicas y privadas, son en general fuentes selladas gastadas, utilizadas para controlar un proceso productivo o el control de calidad de un producto por ejemplo: en medición de espesores, densidad de fluidos, humedad, gramaje, medición de nivel en recipientes, medición de densidad de fluidos que pasan por una tubería, inspección de tuberías y otras actividades.

¿Dónde se encuentra el CADER?

El CADER su ubica en un predio propiedad del ININ de 16.4 hectáreas. Cuenta con cuatro almacenes industriales superficiales, edificio de oficinas (una oficina y sala de juntas), comedor y cocina, 4 sanitarios, dos cuartos de regaderas, cuarto de máquinas, estación meteorológica, casetas de vigilancia. Asimismo tiene diferentes sistemas de seguridad física, equipos de medición de radiación, vehículos, plantas de luz para emergencias e hidrantes. En términos generales, el CADER cuenta con el equipo, instalaciones y personal necesario para realizar sus actividades de operación, control, seguridad física y mantenimiento.

¿Qué cantidad de material radiactivo está almacenado en el CADER?

o 5,690 fuentes gastadas, de diversos radionúclidos.

o Mineral y jales de uranio (724 m3).

o Varilla con trazas de Co-60 (102 ton).

o 5,386 bidones y 1,173 recipientes de diversas capacidades con: tierra contaminada, sólidos compactados, líquidos, líquidos transformados a gel, lodos cementados, equipos, escombro, plástico, fierro, resinas contaminadas, y otros

Algunos de los servicios del ININ en materia de seguridad radiológica, son:

Medición de radiactividad en muestras diversas. Se realiza en el Laboratorio de Vigilancia Radiológica Ambiental, en funcionamiento desde 1983, consiste en la identificación y cuantificación de material radiactivo en muestras diversas como minerales, alimentos, agua, pruebas de fuga y otras. Se cuenta con un programa de intercomparaciones internacionales para controlar la calidad del servicio.

Seguridad Radiológica Dosimetría Interna. La medición de material radiactivo incorporado como consecuencia del manejo de fuentes radiactivas no selladas emisoras gamma, se cuantifica en el detector de cuerpo entero CANBERRA ACUSCAN-II, el cual tiene dos detectores de germanio hiperpuro (GeHp), realizando un barrido de pies a cabeza. En el caso de incorporaciones accidentales se practican mediciones de excretas.

El personal ocupacionalmente expuesto, autorizado por la CNSNS, se somete a vigilancia radiológica de la misma forma que se efectúa un control ambiental, para comprobar que los efluentes líquidos o gaseosos vertidos por el Centro Nuclear y el CADER no produzcan riesgo radiológico al ambiente ni a la población.

Entre los equipos que se utilizan en las labores de protección radiológica, están: los equipos para conteo de cuerpo entero; para detección de radiaciones alfa, beta, gamma y neutrones; los detectores de contaminación alfa, beta y gamma; los equipos para realizar inspecciones en salas de radiodiagnóstico médico e industriales de rayos X, entre otros.  

En este mismo ámbito, se desarrolló un Sistema de Verificación de Detectores Nucleares (SVDN) para la Central Laguna Verde con el objetivo de automatizar el proceso de medición de las condiciones óptimas de operación tanto de los detectores de radiación utilizados en protección radiológica, como de los monitores de área y monitores de proceso, dispositivos no disponibles comercialmente.

Sistema de monitoreo de radiación gamma tipo portal, para vehículos

En el ININ se construyó un sistema de monitoreo de radiación tipo portal que realiza un conteo radiológico en forma continua, permitiendo un mejor control sobre la entrada y salida de material radiactivo al Centro Nuclear. Los detectores del portal de vehículos son de tipo centelleador orgánico plástico, los cuales presentan alta sensibilidad a la radiación gamma y gran volumen de detección. El sistema mide continuamente la radiación de fondo y establece automáticamente un nivel de alarma para que actúe como límite mínimo cuando se monitorea al vehículo que cruza el portal.

Seguridad Radiológica


















¿El agua en San José Iturbide, Guanajuato, es apta para uso y consumo humano?

La Comisión Nacional del Agua (Conagua), el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ) y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) informaron, desde el pasado 19 de abril de 2016, en una conferencia conjunta, que el agua para uso y consumo humano suministrada al Municipio de San José Iturbide, Guanajuato, incluidas las comunidades de La Cantera y La Huerta, cumple los límites establecidos en la Norma Oficial Mexicana NOM-127-SSA1-1994, basados en los resultados obtenidos de laboratorios acreditados.

Asimismo, como parte del trabajo coordinado, la COFEPRIS aseguró que no hay relación entre las muertes de tres menores y dos adultos por leucemia linfoblástica aguda y el consumo del líquido proveniente de dicha fuente de abastecimiento.

El ININ por su parte, expresa técnicamente que, por sí mismo, el radón no constituye un riesgo de irradiación interna en el ser humano, debido a que es un gas noble.

El potencial riesgo debido a la incorporación de Radón en el ser humano proviene de su contenido en el aire, sobre todo en lugares fríos donde se puede acumular por la falta de ventilación y, entonces, constituir un factor de riesgo. En países tropicales o semitropicales como México, este fenómeno no se presenta debido a que los hogares tienen ventilación suficiente para que no se concentre el Radón.

El contenido de Radón en el agua de los pozos profundos y que podría llegar al ser humano, generalmente es liberado casi en su totalidad al ambiente durante el proceso de potabilización por lo que la ingesta de agua potable no constituye un riesgo apreciable para la salud.

Adicionalmente, con el fin de descartar una fuente de contaminación, desde hace más de 40 años, la Conagua ha realizado estudios del marco geológico nacional y su relación con las características físico químicas del agua, por lo que tiene conocimiento del predominio de rocas con minerales en la porción occidental de México y, hasta el momento, no se tiene evidencia de un riesgo derivado de la presencia de este gas noble natural, proveniente de la corteza terrestre.

El ININ, por su parte, expresa que desde el pasado 19 de abril no ha recibido alguna solicitud adicional proveniente de los pozos La Cantera y La Huerta, con el objetivo de determinar parámetros asociados a la radioactividad, y confirma que las últimas muestras determinadas en su laboratorio de dichos pozos, fueron las realizadas de forma conjunta con la Conagua y la COFEPRIS.

Finalmente, la Conagua, el ININ y la COFEPRIS reiteran que, como hasta la fecha se ha realizado, mantienen coordinadamente un seguimiento permanente a este evento, con el fin de actuar en consecuencia en caso de requerirse.

(Información del boletín de prensa del ININ fechado en la Ciudad de México, 7 de octubre de 2016).


Última modificación
08/12/2016 por Javier Ortega Escalona

INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES NUCLEARES - ALGUNOS DERECHOS RESERVADOS © 2014 - POLÍTICAS DE PRIVACIDAD

Carretera México-Toluca s/n, La Marquesa Ocoyoacac, México
C.P. 52750 - Tel. +52(55) 53297200
Comentarios sobre este Sitio de Internet